sábado, mayo 26, 2007

Ishtar



SL: A 80 km. de la actual Bagdad en 1902, Robert Koldewey excababa en busca de una leyenda, buscaba las ruinas de los jardines colgantes de la vieja Babilonia.
JU: Tablillas de escritura cuneiforme, grandes muros de arcadas colosales, los cimientos de la torre de Babel...
SL: Nunca serían demasiados estímulos para aquel concienzudo arqueólogo alemán, de sus excavaciones el Museo Pergamon reconstruyó la magnífica puerta de Ishtar, la octava puerta de la mítica ciudad, construida en el año 575 a.C.
JU: Otros museos albergan piezas de la puerta, pero sólo en Berlín se exhibe completa y con la mayor parte de piezas originales.
SL: También en Bagdad hay otra.
JU: Bueno, creo que no se acabó de construir, planeaban una como entrada al museo arqueológico, pero después del saqueo de miles de piezas de la colección, las trincheras que cavaron al lado, allanando las ruinas de Babilonia con los tanques, en fin...
SL: Ahora te puedes comprar una estela asiria por 57.000 dólares en la frontera con Kuwait, vaya.
JU: Cambiando de tema, aquí os dejamos con una pareja de nipones observando con detenimiento la maqueta de la puerta que se expone al lado de la misma.


3 comentarios:

Unknown dijo...

Es el Norman Bates de la arqueología nipobabilónica (¡toma palabro!).

Anónimo dijo...

por un momento pensé que estábais ahí, en carne mortal...

Anónimo dijo...

En un arrebato, me he mudado definitivamente a wordpress.

Jaja, Beg tiene razón, yo también pensé por un momento que os habíais niponizado.